¿Quién no ha visto nunca esos maravillosos jarrones que decoran las casas de las revistas? ¿o esas vajillas llenas de color y formas que adornan las paredes y casas de nuestras abuelas? Seguro que incluso tú posees algún objeto de cerámica que aporta un toque especial a tu hogar. Lo creas o no, la alfarería es uno de los procesos más antiguos del mundo para dar forma al barro, transformándolo en útiles de todo tipo. Dentro de esta disciplina se encuentra la azulejería, ladrillería y la elaboración de baldosas sin esmaltar.
Fuente: Alfarería Naharro
Si recurrimos a los libros de historia, podemos ver que esta práctica comenzó en el paleolítico superior, donde utilizaban la arcilla para hacer pequeñas figuras y posteriormente vasijas para cocinar los alimentos al fuego. Más tarde, en Mesopotamia, surgen los primeros artesanos especializados en trabajar este material, que además crearon instrumentos como el horno de cocción y el torno para hacer más sencillo su modelado. En la antigua Grecia se popularizó la decoración de las piezas con motivos geométricos, florales e incluso con escenas cotidianas que imitaban a la escultura. De esta forma se usaba la cerámica decorativa como un método de distinción entre los ricos y poderosos y las clases más humildes.
La elaboración de estas piezas comienza con el amasado de la arcilla, para que la humedad y los materiales se distribuyan de forma homogénea a la vez que se extrae el aire de su interior. Después se pasa al modelado en el torno con las manos y otras herramientas hasta obtener la forma deseada. En este proceso es importante utilizar agua para evitar que la arcilla se seque y aparezcan grietas que debiliten su estructura. Posteriormente se deja secar al aire hasta que se endurece y se pasa una lija fina y una esponja húmeda para pulir su superficie. Finalmente se hornea para que esta sea aún más resistente y duradera.
En Alfarería Naharro llevan en la sangre el oficio de alfarero, transmitido generación tras generación, Antonio es de los pocos artesanos que continúan trabajando de forma manual al torno. Especializados en la recuperación de piezas que han desaparecido en La Rioja, Navarra y País Vasco, también realizan piezas decorativas y encargos tanto para la península como para el extranjero. Si buscas una pieza única con ese toque tradicional y elaborado por unas manos expertas no dudes en contactar con ellos, estarán encantados de ayudarte a dar forma a tus sueños.